twitter: @eugenio_fouz
Un profesor, un buen profesor, no es aquel que sabe mucho y no lo transmite a sus alumnos. Un profesor ha de tener la habilidad comunicativa para hacer llegar al alumnado los contenidos de la asignatura. Un profesor bueno tiene que estar loco por su materia y pensar constantemente en cómo impartirla de la manera más atractiva. Es una idea equivocada pensar que el profesor que pone más difícil aprobar es el mejor. Sin embargo, un profesor estricto y exigente será siempre mucho mejor que un profesor blando o sin objetivos claros y elevados para sus alumnos.
Aunque parece obvio, el profesor bueno es el profesor que enseña bien. Ojo, el profesor que sabe qué conceptos necesita aprender el alumno, qué capacidades y habilidades debe impulsar en él. El profesor que sabe motivar al alumno desanimado o de bajo rendimiento. Un profesor debe evaluar-medir- lo que enseña para atender el grado de comprensión de lo enseñado.
[inspirado en la viñeta de ahí arriba tomada de @cabroncuanto1 ]